¿Cuántas veces te has propuesto empezar a comer sano de verdad? ¿En cuántas ocasiones te has planteado sacar de tu vida las grasas saturadas y los alimentos hipercalóricos? Seguro que varias veces al año. Lo primero a tener en cuenta es que llevar una dieta sana y equilibrada es más sencillo de lo que a veces puede parecer. Aunque comamos fuera de casa, siempre tendremos establecimientos como FrescCo en los que el verde impera. Además de hacer una elección acertada cuando comemos fuera, hay otras condiciones básicas que hemos de respetar si queremos mantener una dieta equilibrada. Las resumimos en 7 puntos:
- Comprar con cabeza
Lo primero que hay que tener claro es que todo empieza cuando llenamos el carrito de la compra. En el súper, hay que evitar tentaciones y debilidades e ir con la lista en la mano para comprar lo que realmente necesitamos. Es una forma de no desperdiciar alimentos. Comprar con responsabilidad es no olvidarse ni de las frutas ni de las verduras. Es recomendable planificar los menús para la semana para asegurarnos de que ingerimos los nutrientes necesarios.
- Cocinar al vapor y a la plancha
Apuesta por cocinar al vapor y a la plancha preferentemente. Divórciate para siempre de los empanados y reduce al mínimo el consumo de fritos. No tienes por qué dejar de comer patatas fritas de vez en cuando, pero puedes usar los aparatos que las fríen con una simple y rasa cucharada de aceite de oliva.
- Mantener una correcta hidratación
Llevar una alimentación sana también implica estar bien hidratados. Lo recomendable es beber dos litros de agua al día aunque todo depende de la actividad física que desarrollemos. Podemos alternar el agua con infusiones y zumos naturales. Seguro que ya lo sabes pero nunca está de más recordarlo: no abuses de las bebidas azucaradas y carbonatadas. En los establecimientos de Eat Out encontrarás opciones mucho más saludables.
- Comer la cantidad necesaria de frutas y verduras
Para ingerir la cantidad recomendada de fruta y verdura hay muchos caminos. No hace falta comerlas tal cual, sino que podemos hacer batidos, smoothies o preparar un amplio abanico de cremas frías o calientes.
- Desayunar correctamente
Nos detenemos ahora en el tema del desayuno. Introduce cereales como la avena ya que su alto contenido en fibra te dará una importante dosis de energía. Mezcla los copos por ejemplo con fruta y yogur y ya tendrás listo el desayuno. Es preferible que desayunes en condiciones para que a lo largo de la mañana no te asalte el hambre. Si lo hace, no te tires al pincho de lomo o al cruasán y echa mano de un puñado de frutos secos o un poco de fruta. A la hora de abrir tu local de hostería piensa en que muchos de tus potenciales comensales te pedirán este tipo de alimentos preferentemente.
- No cenar justo antes de irse a la cama
Por último, anota que es recomendable hacer cinco comidas diarias y no muy cuantiosas. Por supuesto, las cenas tienen que ser ligeras. No te vayas a la cama inmediatamente después. De hecho, los nutricionistas aconsejan cenar al menos dos horas antes de acostarnos.
- Hacer ejercicio físico
Por supuesto, una dieta sana siempre ha de ir acompañada de ejercicio físico moderado pero constante. Es el tándem perfecto para vivir de forma saludable. No sólo notaremos beneficios a nivel físico, sino también a nivel anímico.